Lo conseguí

Hoy día 13 de Febrero es el cumpleaños de mi madre, alias " la Americana " o, como yo la llamo, Jenny. Yo quería que fuera un cumpleaños especial y así fue. Pero para ello debía utilizar mi imaginación y mi creatividad heredadas de mi bellísima madre, y, sobre todo, trabajarlo.

Daba así comienzo la Operación Jenny.
Debido a que casi no disponía de un duro, había pensado en hacer algo propio, algo que ni a ella ni a nadie se les hubiera ocurrido. Así, después de un tiempo pensando, llegué a una brillante idea. Esta fantástica idea es muy simple de hacer pero no cuando necesitas que muchas personas te escriban. Veréis, mi idea fue repartir octavillas de diversos colores a todas aquellas personas que conocen a mi madre, obvio, ¿no? ( familia y amigos ). En ellos, debían escribir algún comentario en plan felicitación o, como muchos han hecho, valorándola como persona. Yo hice ambas cosas.

Después de recolectar muchas octavillas, decidí que iba a meter todos los comentarios en una caja de zapatos forrada de papel de regalo, como si de un baúl se tratase. Sin embargo, me pareció un poco soso el meter tantos papelitos ahí, no sé, el resultado de ese regalito sería un poco ausente de vida. Al rato se me ocurrió una solución sustituta, barata por supuesto. Pensé que comprar una cartulina blanca y pegar en él los comentarios sería una mejor idea. Por ello, el Miércoles por la tarde, fui hasta el centro ( aún con la picadura de araña ) y compré la cartulina.

Aún en el centro, fui a las casas o trabajos de las personas a las cuales repartí los papelitos: casa de mis abuelos, Hotel Duque de Nájera, La Pelu de Pe&Drolio, Virelia, casa de mis titos, etc. Era tal el deseo de conseguir los tan ansiados papelitos que no me cansaba y no parecía que tuviera una picadura de araña. Aunque veo normal la ausencia de cansancio, lo estaba haciendo por la persona a la que más quiero de mi vida.

Al día siguiente, Jueves por la mañana, después de volver del instituto ( horas libres ), me puse en marcha y empecé a hacer el regalo. Tuve que estar atento por si mi madre me pillaba in fraganti, pero la suerte fue que no llegó hasta la hora de almorzar. Ya por la tarde, me fui a " ayudar a Gloria ", una buena tapadera a donde realmente iba. El engaño ya se lo expuse con anterioridad, desde el Domingo puesto que le comenté que debía ayudar a mi amiga en un discurso en inglés.

Mi madre, sin sospechar, durmió pensando que iba a casa de Gloria. Pero no. Iba al Hotel Playa de la Luz donde me encontré con las compañeras de trabajo de mi madre. Allí tenían un sobre con muchos comentarios lo cual me lleno la cara de alegría. Una vez que tuve todos los comentarios, me dispuse a ir a mi casa donde iba a comenzar el punto más caliente de la operación.

En casa estaba tan solo mi madre y menos mal que le dije de no entrar en mi cuarto debido a que estaba haciendo reformas y buscando a la maldita araña ( ¿cuántas veces lo de maldita? ). Además, se me ocurrió la idea de poner en la entrada a mi cuarto, miren que imaginación, un folio donde había que poner un código numérico y poner tu huella dactilar. Era evidente. No quería que entrase.

A mi llegada, corrí hasta mi cuarto donde metí " turbo " en terminar mi proyecto. El proceso de creación fue muy bien hasta que, de repente, me dí cuenta de que no cabían todos los comentarios. El título Feliz Cumpleaños se comía la mitad de la cartulina, y aún quitando años no había espacio suficiente. No me desesperé y al rato le encontré una solución. Dicha solución debía aguardar hasta que mi madre fuese a dormir.

La señal para prepararlo todo fue cuando a las 11:30 de la noche mi madre se fue a dormir. Era la señal para empezar con mi plan. Primero fui a mi cuarto a por la cartulina y sus comentarios. Ya en el salón, " enfisé " la cartulina con comentarios en un mueble del salón ( enfisar= pegar con fiso ). Y he aquí la solución a aquellos comentarios que no cabían, tan solo los puse alrededor de la cartulina.

Al terminar observé que quedaban curiosamente 45 papelitos de colores. Digo curioso puesto que la mesa que tenemos en el salón está dividida en 45 cuadritos, además de que el año que viene mi madre cumple 45. Algo tenía que hacer con ello pero, ¿él que?

Pues nada más y nada menos que una frase de 45 letras. Probé varias frases hasta llegar a una de 45 letras justo:

Te deseamos un Feliz Cumpleaños y mucho amor en tu vida

Al acabar, me fui a dormir. Y a la mañana siguiente, después de hacer un examen de Geografía que no sé como me salio ( no estudie nada y escribí 4 folios ) y volver a mi casa, desperté a mi madre. Le tenía preparado unas pequeñas instrucciones de lo que debía hacer:

1. Ir a mi cuarto. La puerta había sido abierta con el código secreto pero nadie la había cerrado.
2. En mi cama, había un folio que le indicaba que allí hubo algo escondido y que ahora estaba en el salón.
3. Entrar en el salón. Para entrar debía introducir un código numérico. Pero tenía pista: dicha edad que dejas atrás

Al entrar en el salón, la cara se le ilumino. Queda fascinada con lo que estaba viendo. Llego un momento en que pensé que iba a llorar, pero no. Lo que sí hizo fue decir: ¡ Al fin has heredado algo de mí ! Ha sido muy inteligente por tu parte y, como no, muy original.

Y en efecto, la imaginación y la creatividad las he heredado de mi madre, tan fantástica. Después de hablar un buen rato sobre lo contenta que estaba y lo inteligente que fui en crear ese " arte " , le demostré que podía impresionarla, pues ella no se lo esperaba.

La verdad es que le he puesto el listón muy alto para mi cumpleaños. Por lo que, puedo decir que ha comenzado la " Batalla de la Creatividad "